Los celos son un sentimiento que todos hemos experimentado. Estos suelen aparecer en diferentes situaciones, como por ejemplo, en las relaciones de pareja y en el entorno familiar o laboral. El problema radica en que no sabemos cómo controlarlos.
Los celos son el malestar causado por la sospecha y temor de perder algo o a alguien. Estos combinan emociones como el miedo y la ira o sentimientos más complejos como la envidia o la ambición.
Estos suelen manifestarse a través de acusaciones o cuestionamientos. Quienes los experimentan desarrollan resentimiento, frustración, impaciencia, y enfado. También se pueden detonar síntomas de ansiedad. Ahora veamos cómo manejarlos.
1. Toma la responsabilidad de tus emociones
Solo tú puedes controlar tus propias emociones. Aprender a entender lo que sientes es la clave. Esto te ayuda a identificar las emociones negativas y saber cómo actuar de manera responsable.
2. Piensa sobre lo que hay detrás de los celos
Identifica el motivo que provoca los celos para entender mejor lo que sientes. Esto te ayuda a revisar si hay algún recuerdo o suceso que los causa o solo es algo sin importancia.
3. Deja de luchar contra ellos
Aceptar y sentir tus emociones es una parte necesaria del proceso. Evitar el sentimiento de celos no hace que este disminuya. Es mejor dejar que fluya sin resistencia.
4. Piensa antes de reaccionar
Actuar de forma impulsiva puede llevarte a tomar decisiones equivocadas o incorrectas. No actúes desde los celos. Existen herramientas que te ayudan a dominar estos impulsos.
5. Habla sobre lo que sientes
Compartir esto con una persona confiable te ayuda a disminuir la presión y liberar el estrés. Desahogarse funciona para dejar salir los sentimientos irracionales.
Si no puedes controlar los celos, acude con un psicólogo. Este te dará las herramientas adecuadas para aprender a manejarlos.