Concepto
La negligencia o descuido del alcance es un sesgo cognitivo que nos lleva a ignorar o subestimar la magnitud real de un problema al evaluar su impacto o al tomar decisiones. Esto quiere decir que nuestra respuesta emocional o disposición a actuar no aumenta de forma proporcionada respecto al tamaño del problema, sino que tendemos a reaccionar de manera similar, ya sea que dicho problema afecte a pocas o muchas personas.
Ejemplos
Imagina que una organización benéfica te pide una donación para proporcionar agua potable a una comunidad de cien personas. En este punto, es probable que te sientas motivado a contribuir. Sin embargo, si la misma organización te dice que tu donación ayudará a diez mil personas, es posible que no aumentes de modo proporcional tu contribución. A pesar de que más personas se beneficiarían de ello, tu disposición a donar no crece en la misma medida.
Otro ejemplo ocurre cuando escuchamos acerca de un accidente de tráfico. Si se informa de un accidente que causó una sola muerte, podríamos sentirnos conmovidos y prestar atención a ello. No obstante, si se informa sobre un accidente que causó cien muertes, nuestra reacción emocional no es cien veces mayor. En otras palabras, no ajustamos nuestra respuesta basándonos en el número de víctimas.
Por último, considera algunas campañas para proteger algunas especies en peligro de extinción. Aquí podrías estar dispuesto a apoyar la conservación de un animal en especial como el panda, por ejemplo. Sin embargo, si se te informa sobre la necesidad de proteger a otras cincuenta especies, es posible que no sientas una urgencia mayor. Una vez más, no estamos calibrando nuestra respuesta en función del alcance real del problema.